¿Has probado la cúrcuma? Esta especia, originaria de la India, está presente en muchos platos típicos de esta zona. Es famosa no solo por darle un sabor muy particular a los alimentos, sino también por todos los beneficios que tiene su consumo. ¿Quieres conocerlos? ¡Pues continúa leyendo y déjate enamorar por el exotismo de la cúrcuma!

cúrcuma en raíz y en formato comercial

Qué es la cúrcuma

La cúrcuma se está ganando cada vez más un lugar preferente en las cocinas españolas. Normalmente, lo que se suele utilizar para cocinar es el polvo de raíz de cúrcuma, que sirve tanto como colorante como saborizante. A muchas personas le recuerda ligeramente al jengibre, aunque tiene unas notas diferentes que le dan un sabor peculiar. Pero ¿qué es? Realmente, la cúrcuma es una planta de hoja perenne que no solo se ha usado como especia, sino también como planta medicinal. Como hemos señalado, lo que se usa de esta planta suelen ser las raíces, conocidas también como rizomas.

Tiene un color anaranjado y se usa, sobre todo, en la gastronomía india. Suele acompañar a la carne, al arroz e incluso al curry. No solo da ese sabor tan propio que ya hemos señalado, sino también un color muy intenso que hace que la sensación ante el plato cambie por completo. A modo de curiosidad, debes saber que también se la conoce como el azufre de Indias, y que está emparentada con el jengibre. ¡De ahí sus similitudes a nivel de sabor!

Tipos de cúrcuma

Se conocen dos tipos diferentes de cúrcuma, la larga y la que es más redondeada. No obstante, se sabe que hay muchos más tipos de especies diferentes dentro de la familia Zingiberaceae. 

La cúrcuma Longa es la conocida como “especia de las mil maravillas”, la que nosotros consumimos. Su planta es muy grande, puesto que puede superar el metro y medio, y cuenta con flores. Su raíz es lo que ha conquistado el paladar de tantos comensales. Dentro de este tipo de cúrcuma, se habla de dos clases diferentes según las propiedades que puedan tener: Madras y Alleppey. La primera es la que tiene menor índice de curcumina, mientras que la segunda tiene un índice mayor. Además, esta última recuerda al limón y a la menta en su sabor puesto que es muy fresca.

Propiedades y beneficios

Lo realmente interesante de esta especia es la cantidad de propiedades positivas que tiene en nuestro organismo. Esto se lo debemos, principalmente, a la curcumina. En el caso de la cúrcuma Longa, el porcentaje es de un 3 % de curcumina con respecto a su peso. Pero es esta la que hace que la cúrcuma tenga beneficios tan interesantes como los siguientes:

  • En primer lugar, cabe señalar que es antiinflamatoria y que puede ayudarte a calmar trastornos como enfermedades del intestino, colitis, artritis e incluso dolores menstruales. Hay quien llega a señalar que hace el mismo efecto que los medicamentos antiinflamatorios, aunque sin ningún tipo de efecto secundario.
  • Además, tiene propiedades cardioprotectoras que harán que puedas prevenir ciertas enfermedades cardíacas. También en este ámbito, es interesante señalar que ayuda a reducir el colesterol malo y que puede regular los triglicéridos. 
  • Hay algunos componentes que pueden ayudarnos a prevenir el cáncer, y diez de ellos se encuentran en los rizomas de esta planta. Entre estos, los más conocidos son la curcumina y los betacarotenos. Y también se recomienda su consumo durante la quimioterapia, puesto que puede ser beneficiosa.
  • Es un antioxidante natural, algo que notarás de forma positiva si lo consumes a menudo. ¡Te sentirás mucho más rejuvenecido!
  • Y, por último, la curcumina también funciona como tónico biliar. Puede incluso ayudarte a eliminar piedras de la vesícula, y es positiva para ayudar con el drenaje hepático. En este sentido, también influye el hecho de que sea un potente antiinflamatorio. 

Más allá de todos los beneficios a nivel físico que ya hemos señalado, debes saber que en China se usa la cúrcuma como remedio para los episodios de tristeza. No solo para tratar la depresión, sino también esos momentos de apatía que todos podemos vivir en algún momento. Se considera que la cúrcuma en polvo ayuda al sistema nervioso y esto hace que el estado de ánimo cambie. Y, además, también se debe tener en cuenta que aumenta la serotonina. ¡Y ayuda a bajar los niveles de estrés!

Son casi incontables los beneficios de la cúrcuma, y eso es lo que ha hecho que cada vez más personas se decidan a introducirla en su dieta de forma habitual. 

Los componentes de la cúrcuma

Más allá de los beneficios, ¿qué aporta la cúrcuma? Pues bien, está compuesta de fibra, proteínas, vitaminas C, E y K, sodio, potasio, cobre, calcio, magnesio, zinc e incluso niacina. Aunque no hemos de olvidar que la usamos siempre en cantidades pequeñas, con lo cual todos estos minerales y vitaminas estarán presentes en una muy baja proporción. 

Efectos secundarios

Puede que te estés preguntando si el consumo de cúrcuma llega a tener efectos secundarios, o si puede ser perjudicial en algún caso. Lo primero que debes saber es que su consumo debe ser siempre moderado, sobre todo en caso de personas embarazadas y menores. Principalmente porque la curcumina puede llegar a impedir que el hierro que consumimos se absorba de manera adecuada. Lo que recomiendan desde la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición es no consumir complementos que contengan curcumina en estos casos, pero no pasa nada por tomar cúrcuma en bajas cantidades. ¡Y de forma esporádica! Así como tampoco pasa nada por tomar estos tipos de complementos cuando no se tienen trastornos ni enfermedades, o no se está embarazada.

 Si la persona se encuentra sana y no tiene ninguna patología, la cúrcuma no deja de ser una especia. Además, como ya hemos visto, la cantidad de curcumina que contiene es muy baja en proporción. Con lo cual no va a resultar dañina jamás. Como siempre señalamos, la clave es no abusar de ningún tipo de alimento. 

Valores nutricionales

La cúrcuma es una buena fuente de muchos nutrientes importantes. Por cada 100 gramos de cúrcuma, se obtiene:

  • Calorías: 352
  • Proteínas: 8.3 gramos
  • Grasas: 5.7 gramos
  • Fibra: 9.7 gramos
  • Carbohidratos: 66.8 gramos
  • Potasio: 1099 miligramos
  • Magnesio: 140 miligramos
  • Hierro: 16.2 miligramos
  • Calcio: 130 miligramos
  • Fósforo: 251 miligramos
  • Vitamina C: 12.6 miligramos
  • Vitamina B6: 0.6 miligramos
  • Vitamina E: 0.9 miligramos
  • Vitamina K: 9.3 miligramos

Cómo tomar cúrcuma

La cantidad de cúrcuma que debes tomar es, más o menos, de 5 gramos. Es decir, lo que podría ser una cucharada pequeña. Lo normal es que esta se consuma en polvo, puesto que es lo más fácil de encontrar en el mercado. Si ya tienes la cúrcuma en polvo y quieres saber cómo añadirla a tus platos, ¡nosotros te enseñamos!

Lo más sencillo es añadirla a las ensaladas, mezclándola bien con el vinagre y el aceite de estas. Además, puede ser buena idea añadirle algo de pimienta negra, aunque de esto hablaremos un poco más adelante. 

Son muchas las personas que la usan como ingrediente del curry, a la manera tradicional india. ¡Y eso hará que todos tus platos cambien por completo! Aunque también puede usarse incluso como condimento del té verde, en la leche de coco o en cualquier guiso. Si es en un guiso, es interesante siempre añadirla cruda al final del proceso, porque si no se irá cocinando poco a poco y eso hará que se pierdan sus beneficios.

Además, puedes usarla en prácticamente cualquier plato como colorante. ¡Incluso en las paellas! Tendrán un toque picante e incluso dulzón, mezclado con amargo, y es por esto por lo que siempre se añade en cantidades pequeñas. 

Cúrcuma y pimienta negra

Es curioso, pero se ha descubierto que nuestro cuerpo puede llegar a no absorber del todo bien la curcumina cuando esta está sola. No obstante, la absorción mejora hasta un 2000 % cuando se combina con la pimienta negra. Es por eso por lo que se recomienda mezclar ambas especias para, de esta manera, conseguir todos los beneficios de la curcumina (encuentra aquí cápsulas de cúrcuma con pimienta negra).

Sin duda, la cúrcuma es uno de estos alimentos a los que merece la pena echar un ojo. ¡No te quedes sin probarla!

Bibliografía

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